MOISÉS LEBENSOHN
“Los sindicatos han dejado de ser los órganos de expresión
autónoma de los trabajadores en defensa de sus intereses gremiales!
DISCURSO PRONUNCIADO
EN LA CONVENCION NACIONAL CONSTITUYENTE DE 1949
3
de Marzo de 1949
EL REGIMEN
Enjuiciamiento
El
presidente de la República ha definido el proyecto de reforma que dio a conocer
en su carácter de jefe del partido oficial como el coronamiento y la
consolidación de la obra revolucionaria. Y en su discurso pronunciado en este
recinto señaló el cuadro pre-revolucionario y la gestión y tendencias de su
movimiento. Nosotros también creemos que la reforma constituye la etapa última
del plan presidencial y consideramos indispensable, también, establecer qué
orden se intenta consolidar, porque sólo del examen de los hechos obtendremos
su clave de juicio e interpretación.
El
signo fundamental de este momento reside en la coexistencia, en el ánimo
público, de dos revoluciones. Parecen coincidir en su idioma y aún en sus
consignas, mas discrepan profundamente en su esencia y sentido. Hay una
revolución que ansiaba el pueblo y otra que proclama el gobierno. He aquí la
médula del problema político argentino. La revolución que quería el pueblo
constituía la realización de la promesa argentina de crear un ámbito nacional
en que resplandeciese la dignidad del hombre. Vivió en el rumbo trazado por los
fundadores y en la esperanza que alenté generación tras generación al empeño de
construir la Argentina aún irrealizada. El servicio de esta causa fue la razón
de ser del Radicalismo, persiguiendo una continuidad histórica quebrantada en
1930.
El
espíritu de la revolución impulsó la lucha contra el régimen impuesto y contra
sus características; el apartamiento del pueblo en la formación de los
gobiernos, la preeminencia de los factores de injusticia económica y social y
la defección de las capas dirigentes, que, en su mayoría, persiguen sus propios
fines y desertaron de su función nacional. Contra ese sistema y esas tendencias
se batió el Radicalismo, en contienda desigual, abnegadamente, y en sus filas
una generación quemó sus mejores años en la lucha contra el privilegio nacional
e internacional.
Cuando
vino el golpe de estado del 4 de junio, el clima de insurgencia espiritual
poseía al país. La caída del régimen conservador marcó el afloramiento de las
grandes aspiraciones contenidas por la mentira electoral, de los grandes
anhelos de renovación de la argentina y de afirmación del contenido moral de la
vida pública, de enaltecimiento de los métodos de nuestra democracia y de una
profunda transformación económica y social que afianzare las libertades
esenciales.
LA REVOLUCION - MITO
Hay
otra revolución, aquella que apareció en el gobierno “de facto”, que titubeó en
sus primeros pasos y restableció las palabras proscriptas de libertad y
democracia la cuando la guerra mundial tuvo decisión; que alzó las consignas
populares que ya formaban la conciencia pública, en tanto bloqueaba la
expresión de su pensamiento a quienes las predicaron y sustentaron en la larga
batalla contra las direcciones políticas y económicas enseñoreadas del país
desde 1930.
Entre
esta revolución - mito, creada por la propaganda oficial, que semeja por
mimetismo a la revolución querida por el pueblo, y el régimen que tiene su sede
en la Casa de Gobierno, existe una distancia inmensa. Podrá mantenerse la
confusión mientras se trabe la libre información por el control de los grandes
medios de publicidad y mientras de cada diez argentinos nueve viva en la
penuria totalitaria de escuchar únicamente la voz del amo; la voz del gobierno.
Han
transcurrido seis años desde la toma del poder y tres desde los comicios que le
dieron ratificación popular. El país confronta la consolidación constitucional
de lo que el Régimen ha denominado su revolución nacional, aunando dos palabras
mágicas: la que designa el sentido revolucionario de la época y la que afirma
el fervor con que los hombres se sumergen en la empresa colectiva de superar la
grandeza de la Nación.
Otros
movimientos contemporáneos se ampararon bajo el nombre de revolución nacional.
En países socialmente resentidos por el sufrimiento de la guerra y de la
desilusión de la paz, con estructuras políticas inestables, aparecieron
seductoras las perspectivas de jugar la gran aventura de la conquista del
poder. Usóse una fraseología revolucionaria y se declamó una exuberante
demagogia revolucionaria alternada con el régimen del régimen liberal. El
adversario no era el capitalismo en cuanto tenía de lesivo a la economía
popular, pues los grandes monopolios se ligaron a las nuevas expresiones
políticas, cuando no las financiaron previsoramente. Fue contra el liberalismo
espiritual, contra las libertades civiles y políticas, que se libraba la
revancha del renaciente absolutismo. ¿Quién realizó la revolución nacional en
Alemania? El partido socialista nacional alemán. ¿Cuál fue su organización
básica para la dominación del pueblo alemán? El Frente del Trabajo. ¿Qué
estructura forjó en Italia la revolución nacional? El Estado proletario y
fascista. ¿Cuál fue su Instrumento de propaganda? La Carta del Lavoro. Tienen
su filiación las denominaciones que aparecieron últimamente en la Argentina.
¿Qué
hizo el señor Mussolini cuando capturó el poder? Mantuvo las instituciones
constitucionales del reino italiano; no suprimió el parlamento, pero lo
desjerarquizó; no suprimió la oposición, pero la humilló. Existía un régimen
electoral de representación proporcional y lo reemplazó en 1923 por otro que
otorgaba dos tercios a la mayoría. No estableció la censura, pero creó un
sistema de coacción económica y moral que le permitió ir dominando
paulatinamente a la prensa.
Sólo
quedaron los pequeños periódicos de provincias y enhiesto en la cumbre de su
prestigio internacional “IL Corriere Della Sera”, hasta que en el curso de los
años la presión del régimen sofocó al noble vocero que mantenía el ideario del
“risorgizniento”.
Y
cuando el hombre de la calle en Italia quería enterarse de los acontecimientos
de su patria y del mundo, ¿que leía? Sólo podía formarse juicio de acuerdo con
las directivas del Ministerio de Propaganda. Toda la prensa estaba sometida al
contralor de la organización oficial.
EL CONTRALOR DE LA PRENSA
¿Qué de
distinto pasa en la Argentina? De los once diarios de mayor circulación en la
Capital Federal, nueve forman parte del sistema oficial de la prensa dirigida,
cuyas líneas señala desde la Casa de Gobierno el secretario administrativo de
la Presidencia de la Nación, que se sienta en esta convención. Constituyen la
propiedad privada de los personajes del Régimen o están fiscalizados por los
bancos oficiales. Sobre los dos únicos grandes diarios libres que quedan penden
las amenazas del control de cambios y del destino de “IL Corriere della Sera”.
Los
periódicos representativos de los partidos políticos adversos al Régimen han
desaparecido. El vocero oficioso del Radicalismo fue clausurado por decreto del
Poder Ejecutivo. Sancionó una caricatura relativa a la gravitación Imperialista
de los Estados Unidos en la política latinoamericana, caricatura que ofendió el
sentimiento de solidaridad continental tan sensible en nuestras esferas
oficiales cuando era embajador de la gran nación del norte el señor
Messerschmidt, amigo dilecto del presidente y presidente del “holding que
controla a la C.A.D.E.
-Hablan simultáneamente varios convencionales y suena la
campana-
Visca.
- Mussolini daba aceite de ricino y Perón da de comer al pueblo.
-Hablan
simultáneamente varios convencionales y suena la campana-
Lebensohn.
- En Italia fue necesario dar aceite de ricino porque no había jueces dóciles.
-Hablan varios señores convencionales a la vez y suena la
campana-
Presidente (Mercante)...
Continúa con la palabra el señor convencional de Buenos Aires.
Lebensohn.-
Parece el parlamento fascista: los mismos gritos cuando una voz libre describe
la realidad del Régimen.
-Hablan
varios señores convencionales a la vez y suena la campana-
Lebensohn. - La
Constitución establece que el Congreso dicta la legislación penal, y el Poder
Ejecutivo se atribuyó el derecho de crear por decreto una nueva figura
delictual. La Constitución establece que el Poder Ejecutivo no puede arrogarse
funciones judiciales, y el Poder Ejecutivo aplicó “per se” la penalidad que él
mismo instituyó. La Constitución confiere al Poder Judicial la protección de
las libertades públicas y el Poder Judicial, en ninguna de sus instancias, tan
abundantemente representadas en el sector del partido político oficial,
encontró modo de pronunciarse sobre tales violaciones constitucionales. Más
digna fue la conducta de la Suprema Corte alemana. Dos veces clausuró Hitler al
órgano oficial de la socialdemocracia, y dos veces la Suprema Corte ordenó su
reapertura hasta la asunción de los plenos poderes por el régimen nazi.
Por
otros procedimientos encubiertas, mediante decisiones de carácter municipal que
ningún juez argentino se atreve a revocar, o ejerciendo intimidación sobre los
talleres gráficos, se eliminé de la Capital al resto de la prensa opositora,
relegada al interior, donde los pequeños tirajes no inquietan al Régimen, mas
donde tampoco está exenta de amenazas como o lo demuestra la clausura de “El
Norte», de San Nicolás, y el atentado criminal contra “El Clarín”, de
Chacabuco, incendiado en pleno día con bombas igníferas por un piquete de
“gangster” enviado desde la Capital Federal.
Sin
libertad de prensa no existe democracia. «Es uno de los grandes baluartes de la
libertad”, estableció la declaración de los derechos de Virginia, “y sólo podrá
ser restringida por un gobierno despótico”. Por la libertad de prensa,
suprimida en la Argentina, el pueblo de París inició una de sus tres gloriosas
revoluciones, y al regar con su sangre las barricadas que derribaron a la
opresión, no defendió sólo el derecho de unos hombres a publicar sus ideas,
sino su propio derecho a decidir de su destino, con pleno conocimiento de todas
las ideas.
IDENTIDAD CON EL REGIMEN FASCISTA
¿Qué
pasaba en Italia con el obrero de las ciudades industriales del norte o con el
campesino del sur que deseaba una hora de esparcimiento y se dirigía al
cinematógrafo? En el noticiario que obligatoriamente debían pasar, aparecían a
diario las figuras de! régimen en actividades tendientes a promover la
atracción genera. Y cuando regresaba a su casa y quería informarse de cuanto
ocurría en el país o en el mundo, en balde giraba el dial de la radio. Sólo
escuchaba la voz del Duce o de sus corifeos y las informaciones organizadas
sistemáticamente en el Ministerio de Informaciones para reformar el juicio del
pueblo, seleccionado con cuidado noticias y comentarios para justificación y
gloria del régimen.
¿Qué de
distinto pasa en la Argentina?
Waite Figueroa.
- Que no les damos aceite de castor.
Lebensohn.
- Es lo único que faltaba, porque no lo necesitan; pero lo van a aplicar cuando
la resistencia popular crezca contra ustedes. Además, ustedes ya tienen
mentalidad para aplicar el aceite de recino, lo que es previo para cumplir la
acción.
También
aquí, como en Italia, obligatoriamente todos los días los cines tienen que
exhibir noticiarios confeccionados sin disimulo bajo el contralor de la
Subsecretaría de Informaciones, para exaltar las bondades y figuras del
gobierno. Y si el hombre del común desea enterarse a través de la radio de
cuanto ocurre en el país o en el exterior, podrá girar el dial de la radio
cuanto quiera que jamás oirá la voz de un hombre que no pertenezca al Régimen,
y siempre deberá atenerse a las mismas informaciones meticulosamente preparadas
bajo la dirección oficial.
- Hablan varios señores convencionales a la vez, y suena la
campana-
Lebensohn.
- ¿De quiénes son las estaciones de radio? En este mismo recinto, en la Cámara
de Diputados, fue denunciada la adquisición de las radios por la dirección de
Correos y Telecomunicaciones. En la Comisión de Reglamento nuestros
representantes quisieron investigar en vano quiénes son sus propietarios
actuales. Yo voy a decir que fueron adquiridas por el Estado sin autorización legislativa,
concediéndose su uso a sociedades anónimas, tras las cuales se esconden
jerarcas del Régimen para obtener grandes ganancias y para controlar ese
elemento vital para la información y juicio del pueblo.
La
radio es un instrumento esencial en la formación de la conciencia pública, a
tal punto que su libertad es signo definitorio de un régimen. Donde la
oposición tiene libre acceso, en un plano de igualdad con el gobierno, se vive
el decoro de la libertad, y donde es monopolio del partido oficial, como arma
sin réplica para la sugestión de las multitudes, se sufre la humillación de una
dictadura.
La
libertad de radio es más importante todavía que la libertad de prensa. La
lectura de la palabra escrita requiere un acto de decisión: la palabra radiada
se impone, penetra en la intimidad del hogar y en el fuero de nuestros sentidos
y tiene un poder de convicción que sólo el acento humano puede proporcionar.
Son
democracias, desde Inglaterra hasta Estados Unidos, desde Francia a Canadá,
todos aquellos países donde las corrientes de la opinión pública pueden
propalar sus ideas, en función de pensamiento y de crítica, O las pequeñas
naciones como Uruguay, donde no existe para los partidos políticos
fiscalización de ningún género, donde cualquier ciudadano puede emitir sus más
enérgicos juicios contra el gobierno, porque allí no actúa otro juez que la
conciencia del hombre del pueblo, soberano para escuchar y decidir.
UN CRIMEN CONTRA LA LEY NATURAL
Y
sigamos el paralelismo entre los comienzos de la revolución nacional de Italia
y de la Argentina. Regresaba el niño italiano a su hogar. ¿Qué traía? Las
consignas políticas del régimen. Así, la revolución nacional dogmatizaba las
conciencias desde la infancia. ¿Qué de distinto ocurre en nuestro país? El
gobierno utiliza al niño como vehículo de penetración en el hogar y encasilla
su espíritu para deformar el alma del hombre del mañana. Los «slogans” de la
propaganda oficial son temas de clase y de examen, y sus planes y propósitos
políticos, incluso éste de la reforma constitucional, objeto de las
composiciones infantiles. Ya en muchas escuelas, a imagen y semejanza de los
procedimientos del fascismo, se incluye en las lecciones de escritura frases
vinculadas a las figuras del Régimen. Así se destruye la alta función unificadora
de la escuela argentina. Así pretende anular, desde su formación, al espíritu
crítico de la futura ciudadanía y así se comete el crimen totalitario, contra
la ley natural, de despojar al padre del amor de su propio hijo.
LOS SINDICATOS
Como en
Italia, los sindicatos organizados verticalmente por una dirección centralizada
que destruye la estructura federativa argentina, constituyen el soporte
principal del Régimen.
Como en
Italia, fueron ganados uno a uno por voluntad espontánea o por artes de
seducción o coacción. Cuando mantienen independencia y rehúsan someterse a los
designios oficiales, se eclipsa la libertad constitucional de asociación y
aparece interviniéndolos el secretariado de la CGT, con el respaldo de la
Secretaría de Trabajo y la Policía Federal actuando de consuno. Y si el
espíritu de libre decisión permanece, las intervenciones quedan
indefinidamente, como ocurre con los telefónicos y los obreros municipales.
Los
sindicatos han dejado de ser los órganos de expresión autónoma de los
trabajadores en defensa de sus intereses gremiales. Han quedado reducidos al
“rol” de instrumentos de control, dirección y movilización de la clase obrera,
según las determinaciones de la Casa de Gobierno. Y no es que se mantenga a
estos fines en recato. El actual presidente de la Nación, en discurso
pronunciado en la Bolsa de Comercio, al referirse a los objetivos de creación
de la Secretaría de Trabajo, definió su propósito de que “pudiera ser un
organismo que dirigiese al movimiento sindical argentino en una dirección, lo
organizase e hiciese de esta masa inorgánica y anárquica una masa organizada
que procediese racionalmente de acuerdo a las directivas del Estado”.
Visca.
- ¿Porque qué no explica el 17 de octubre?
Presidente (Mercante).
- No interrumpa el señor convencional al orador que está en el uso de la
palabra.
Lebensohn. - Se lo
diré, señor convencional. La repetición de frases estereotipadas en el cine, la
Radio, la prensa, la escuela, el cuartel, el sindicato dirigido, la reiteración
de estados conmociónales provocados con artificiosa habilidad, permitió a las
dictaduras europeas crear el clima de sugestión que hipnotizó a inmensas
muchedumbres. ¿Qué de extraño tiene, pues, el éxito de esas mismas técnicas en
nuestra tierra, si la regulación de las libertades públicas impidió
contraponerles el conocimiento de los hechos y las ideas que posibilitaran el
libre juicio de la ciudadanía?
LOS PARTIDOS POLITICOS
Y
llego, señor presidente, a uno de los aspectos definitorios de la situación
argentina. La vida de los partidos políticos no es cuestión particular de cada
partido; es un problema substancial de la democracia. En la democracia los
ciudadanos no actúan aislados, sino agrupados en grandes corrientes cívicas, y
el sistema fracasa si en cada una no se aplica lealmente y el pueblo no puede
deliberar, elegir y fiscalizar a sus representantes.
Como
argentino que aspira a la dignificación de los métodos políticos, tengo derecho
a examinarla forma como los ciudadanos adheridos al partido oficial realizan su
voluntad política a través de sus organismos. Del mismo modo tengo el deber de
ofrecer al resto de la ciudadanía la seguridad de los procedimientos mediante
los cuales los afiliados al Radicalismo deciden de su conducta política.
El
partido oficial se ha convertido en órgano del Estado. No se ha dictado una
ley, como la alemana del l diciembre de 1933, que establezca la unión
indisoluble entre el partido y el Estado; pero la carta orgánica del partido
establece que el afiliado que ejerza la presidencia de la Nación posee el
derecho de control de la vida partidaria, lo que resulta exactamente lo mismo,
puesto que la fusión entre el Estado y el partido se realiza, por encima de la
Constitución, entre la jefatura del Estado y la jefatura del partido.
En la
democracia, las jerarquías nacen desde abajo hacia arriba y las
responsabilidades se plantean desde arriba hacia abajo. En los partidos
totalitarios se aplica el «Fuehrer prinzip”; la jerarquía parte desde la
cúspide hacia abajo, y las responsabilidades se rinden desde abajo hacia
arriba. La dirección nacional designa la dirección regional y ésta a la local.
La dirección local es responsable no ante el pueblo, sino antela dirección
regional, y ésta ante la nacional, donde reside la fuente del poder.
Por
primera vez en la historia de los partidos políticos argentinos, la estructura
que está rigiendo al partido oficial es exactamente la misma de los partidos
totalitarios, y en ella y en su vinculación con el Estado naufragan todas las
instituciones constitucionales argentinas y los principios históricos de la
organización nacional.
No
existe separación de poderes cuando el consejo superior del partido oficial que
actúa bajo la jefatura del presidente de la Nación designa los candidatos a
diputados nacionales que han de formar el otro poder del Estado, y hasta los
propios convencionales que están ejerciendo el poder eminente de modificarla
Carta Fundamental.
-Varios señores convencionales hablan simultáneamente, y suena
la campana-
Presidente (Mercante).
- Continúa en el uso de la palabra el señor convencional por Buenos Aires.
Lebensohn.
- No existe separación de poderes cuando esos constituyentes son nombrados por
el cuerpo político representativo del régimen y entre ellos se encuentran
cuatro de los cinco jueces de la Corte y el sector del partido oficial que
reconoce la jefatura omnímoda del titular del Poder Ejecutivo de la Nación.
El
régimen federal se ha extinguido cuando ese cuerpo, que representa una unidad
de comando incompatible con la democracia y con los principios del federalismo,
designa los candidatos a gobernadores, a miembros de las Legislaturas
provinciales, y hasta a los senadores nacionales que han de investir la
delegación del pueblo de las provincias de la Cámara representativa en la
autonomía de los Estados.
-Hablan varios señores convencionales a la vez, y suena la
campana-
LAS ESTRUCTURAS REALES
Lebensohn.
-Si a través de los resortes del partido oficial se ha suprimido en los hechos
la separación de poderes y el federalismo, y por su intermedio el presidente de
la república ejerce la dirección de los cuerpos políticos del país, también
controla a su arbitrio los demás aspectos de la vida nacional. El presidente de
la República, que personifica en los hechos al Estado, dirige la cultura
oficial, mediante los rectores de las universidades, que él designa; a los
sindicatos obreros, por conductores gremiales que son los portavoces y
ejecutores de sus decisiones.
Borlenghi.
- ¡Está fuera de la cuestión!
- Hablan varios señores convencionales ala vez, y suena la
campana-
Lebensohn.-
Regula el nivel de vida de la inmensa mayoría del pueblo argentino, autorizando
la inflación sin límites del circulante, que desquicia la economía nacional,
reduce el valor adquisitivo de los sueldos y salarios y enriquece a los
poseedores.
Borlenghi. - ¡El
señor convencional no está en la cuestión!
Presidente (Mercante).
- La presidencia ruega al señor convencional que se ajuste a la cuestión en
debate.
Lebensohn.
- Estoy en la cuestión.
Borlenghi.
- ¡No está en la cuestión!
-Hablan varios señores convencionales a la vez, y suena la
campana-
Presidente (Mercante).
- Continúa en la palabra el señor convencional por Buenos Aires.
Lebensohn. -Advierto,
señor presidente, que el Radicalismo va a realizar su examen de la Constitución
real que está viviendo el pueblo argentino de acuerdo con su propio concepto y
con su propia responsabilidad histórica. Vamos a hablar con absoluta libertad
en este recinto.
El
señor presidente de la República ha analizado la estructura del Estado
argentino tal como él la ve. La Unión Cívica Radical tiene el derecho de
analizar desde estas bancas del recinto de la Convención Constituyente las
estructuras reales del pueblo argentino tal como ella las advierte.
El
señor presidente de la República determina las orientaciones económicas a
través de la burocracia del Consejo Económico Nacional que de él depende; los
artículos que pueden ingresar en el país y las zonas de privilegio, verdaderos
feudos industriales que se establecen al amparo de las restricciones que él
impone; regla el rendimiento del trabajo de los agricultores, fijando el precio
que recibirán por su producción...
Correa.-
Señor presidente; el señor convencional está fuera de la cuestión.
Lebensohn.-
Estoy determinando las estructuras que se quieren consolidar
constitucionalmente.
- Hablan varios señores convencionales a la vez, y suena la
campana-
Presidente
(Mercante). -
Sírvanse no interrumpirlos señores convencionales al orador que está en el uso
de la palabra.
Lebensohn.
- El señor presidente encauza la dirección del crédito y dirige la política
internacional sin que la Cámara de Diputados, única en que actúan legisladores
radicales, haya tenido posibilidad de considerarlos pactos en ejecución que
lesionan nuestra libertad política y económica en la lucha contra los
imperialismos.
El
señor presidente ejerce una potestad irrestricta en el orden político y en los
campos económicos, financieros, sindicales y culturales; controla a su arbitrio
los rumbos de la vida nacional. Por otros caminos, con otros procedimientos
usando sus mismas técnicas, ha alcanzado la finalidad totalitaria.
Ahí
está instalado el Régimen en sus realidades, dispositivos y orientaciones. Se
ha desarrollado en el quebrantamiento de la estructura constitucional y en la
regulación de las libertades públicas; ha centralizado las direcciones del país
y pretendido imprimir su concepción en todos los aspectos de la existencia
argentina. No puede consolidarse sin la permanencia indefinida del conductor
que constituye el centro de las decisiones. De ahí la necesidad de la
reelección presidencial. Sin continuidad del jefe, no existe continuidad del
sistema y no se concibe al jefe sin la total concentración del poder.
LA REELECCION
El
artículo 77 de la Constitución es la garantía suprema de las libertades
populares y la última valla contra la arbitrariedad. Puede un gobernante
avasallar todos los derechos. Su poder tiene límite cierto, plazo
infranqueable, en la prohibición dictada por el sufrimiento de dos generaciones
argentinas. Su remoción es el objeto de la reforma, y el Radicalismo se opone
esta “in totum”, en su conjunto, en defensa del orden democrático y de las
libertades fundamentales, y en lealtad con la historia y el destino de nuestra
Patria. Votará contra la reforma porque entraña el propósito de consolidar,
fortificar y perpetuar al absolutismo gobernante y persigue la única finalidad
de legalizar el establecimiento del sistema que está destruyendo esencias
republicanas y precipitando a nuestra Patria en la abyección del despotismo.
En el
curso de nuestra organización constitucional, la vida republicana, casi siempre
fue amarga, pudo desarrollarse evolutivamente. Los presidentes solían ejercer
influjo decisivo; su poder era inmenso, incontrolado dentro del lapso en que
ejercían la dirección de la República. Imponían a sus sucesores, pero éstos,
conscientes de la fuerza que reúne el poder presidencial, jamás se resignaron a
ser meros ejecutores de directivas ajenas. Y en esa renovación de fuerzas, de
procedimientos y de hombres, la democracia argentina se salvó y la República
subsistió aun en las épocas dolorosas del fraude.
A este
gran recaudo constitucional, los círculos de intereses que siempre rodean al
poder personal quieren suprimirlo, no en interés del país, sino en su propio
interés. No tienen la responsabilidad histórica del presidente, sino la
oportunidad de enturbiarse con el fango de los negociados y de beneficiarse con
el usufructo de su influencia, operando ala sombra del poder presidencial.
- Hablan varios señores convencionales ala vez, y suena la
campana-
Lebensohn.-
Con plena responsabilidad digo que aún cuando el presidente fuese un hombre de
mi partido, tal es el conjunto que concentra el poder presidencial que podría
lograr su reelección indefinida, aunque no representara a las corrientes más
cuantiosas de la opinión pública. Esta situación iría socavando el régimen
republicano y abriendo una fisura profunda entre el gobierno y el país y su
consolidación habría de provocar en esta tierra, que siempre ha sido tierra de
resistencia a la opresión, las reacciones que son condignas a los pueblos que
aman y defienden su libertad. A la primera reacción, el Régimen está muerto. Si
triunfa, no tiene otro remedio que la huída, pero si logra la victoria, la
sangre derramada...
Visca. -
Estamos frente a una cuestión ajena al debate...
- Hablan varios señores convencionales ala vez, y suena la
campana-
Presidente (Mercante).
- Continúe en el uso de la palabra el señor convencional por Buenos Aires.
Lebensohn. -
Hablar de la reelección es estar fuera de la cuestión. Ese es el drama...
- Hablan varios señores convencionales ala vez, y suena la
campana-
Lebensohn.-
Pero si logra la victoria, la sangre derramada convierte al presidente en su
prisionero para siempre; no puede volver a ser un hombre común, desfilar por la
calle, porque los odios despertados le obligan a permanecer en el poder y
rodearse de la vigilancia que protege al poder. Podría huir al extranjero, pero
sus parciales se lo impedirían, porque necesitan la continuidad para su
defensa...
- Hablan varios señores convencionales a la vez, y suena la
campana-
LOS ANTECEDENTES DE LATINOAMERICA
Lebensohn.
- Esta es la trágica historia de todos los dictadores latinoamericanos. Esta es
la historia de Rosas.
-Hablan varios señores convencionales a la vez, y suena la
campana-
Lebensohn.-
Esta es la historia de los presidentes latinoamericanos que convocaron a
asambleas constituyentes con el propósito de modificarla Constitución a fin de
posibilitar sus reelecciones...
-Hablan varios señores convencionales a la vez, y suena la
campana-
Presidente (Mercante).
- No interrumpan los señores convencionales al orador que está en el uso de la
palabra.
Lebensohn.
- Tengo aquí una cantidad de antecedentes que demuestran hasta que punto el
dolor de los pueblos de Latinoamérica ha necesitado crear exigencias
constitucionales como las del artículo 77 para defender su derecho a la
libertad.
En
Guatemala, pequeño país que estuvo sometido a dictaduras, el presidente no pudo
ser reelecto, sino después de doce años del cese de su ejercicio.
-Hablan varios señores convencionales a la vez, y suena la
campana-
Lebensohn.-
La Constitución de México expresa que por ningún motivo y nunca podrá volver a
desempeñarse ese cargo después de concluir su mandato, en Nicaragua no pueden
ocupar la primera magistratura ni los parientes dentro del cuarto grado de
consanguinidad o segundo grado de afinidad del presidente de la República o del
que ejerza la presidencia durante cualquier tiempo de los últimos seis meses
anteriores a la elección; el militar que hubiese estado en servicio activo
sesenta días antes de la elección se halla en la misma situación; en Panamá..,
Un
convencional. - Panamá, ¿qué país es?
Lebensohn.
- Se ve que es convencional de la mayoría. Lo mismo ocurre en Panamá respecto
de los parientes del presidente dentro del cuarto grado de consanguinidad o
segundo de afinidad. Y así en toda Latinoamérica, salvo Santo Domingo y
Paraguay.
¿Qué
son los veinte años de reelección de Estrada, en Guatemala; qué son los trece
años de reelección de Ubico, en el mismo país? ¿Qué es el Trujillo, en Santo
Domingo y las reformas constitucionales de 1929, 1932 y 1934 introducidas por
él? Cuanto más despreciable en un régimen, tanto más reformas constitucionales.
En
Cuba, en 1925, se produce al advenimiento de Machado al ejercicio del poder, ya
en 1927 reforma la Constitución para conectar su prolongación indefinida, hasta
que en 1933, después de haber martirizado a ese pueblo con sus torturas y sus
«porristas”, después de haber ensangrentado la hermosa isla del Caribe, huyó a
Estados Unidos, donde pasó sus últimos días en el desprecio de su patria. ¿Qué
es de Venezuela, que tuvo desde 1908 hasta 1935 el mismo dictador, Juan Vicente
Gómez, de quien sólo se liberó el país con su muerte? El día de la muerte de
Gómez el pueblo se abalanzó contra las puertas de la cárcel “La Rotunda” y
aserrando los barrotes extrajo engrillados a combatientes de la juventud, a
universitarios, a los mejores hombres de Venezuela que habían estado
enfrentando el régimen despótico.
En
México, desde 1877 hasta 1911, durante treinta y cuatro años que podríamos
calificar con adjetivo de Yrigoyen. «Años seculares” la sangre cubrió los
caminos de la tierra mejicana al grito de “no reelección”, y el pueblo estuvo
despojado de su libertad y el país de su adelanto moral durante medio siglo por
la ambición de mando de un presidente y de sus corifeos, que disponían de todos
los resortes del poder para la permanencia en el gobierno. Es Leguía, en el
Perú, que en 1919, apenas llegado al poder, convocó a una convención
constituyente. Pretextaba también la inclusión de garantías sociales, mas su
propósito real era posibilitar su permanencia en el poder, que mantuvo hasta
1931, en que fue derribado después de catorce revoluciones; cayó preso y murió
en la cárcel.
Giovanelli.
- ¿Cómo terminó Yrigoyen?
- Hablan varios señores convencionales a la vez, y suena la
campana-
Presidente (Mercante).
- Continúa en el uso de la palabra el señor convencional por Buenos Aires.
López Sansón. -
Ustedes lo invocan a Yrigoyen cuando les conviene.
- Hablan varios señores convencionales a la vez, y suena la
campana-
Presidente (Mercante).
- Continúa el señor convencional por Buenos Aires en el uso de la palabra.
Lebensohn.
- En el Brasil Getulio Vargas llegó al gobierno en 1930 y permaneció en el
poder hasta 1944.
Miel Asquia.
- Yo pregunto, señor presidente...
Presidente (Mercante).
- No interrumpa el señor convencional al orador que esta en el uso de la
palabra.
Lebensohn.-
De 1930 a 1934 fue presidente provisional. En 1934 se dictó la nueva
Constitución democrática brasileña, y en 1938, concluido el período
presidencial, el jefe de Estado, que no podía ser reelegido, de acuerdo con la
Constitución, por acto de fuerza personal promulgó una Constitución corporativa
-que, por singular paradoja, es la única Constitución corporativa del mundo,
pues la italiana y la alemana nunca existieron- y permanece en el poder hasta
1943, en que fue derribado por un golpe de Estado.
LA REFORMA DE LA CONSTITUCION DE ESTADOS UNIDOS
Es la
historia trágica de América latina, es la historia trágica de la Argentina. Y a
mi me extraña que un hombre tan culto como el señor informante del sector de la
mayoría, que invocó en abono de su tesis, en favor de la reelección
presidencial, la opinión de Hamilton, centralista y conservador, en los
comienzos de la organización constitucional norteamericana, no haya invocado
las actuales corrientes constitucionales norteamericanas. En Estados Unidos
–después de la histórica presidencia de Roosevelt, salvador de la humanidad-,
en Estados Unidos, donde el federalismo garantiza los derechos del pueblo y
evita la omnipotencia del estado federal...
Miel Asquia.
- Perón, salvador del pueblo argentino.
- Hablan varios señores convencionales a la vez, y suena la
campana-
Presidente (Mercante).
- Continúa con la palabra el señor convencional por Buenos Aires.
Lebensohn. - A
pesar de que en Estados Unidos las libertados públicas gozan de una total
garantía...
Perazzolo.
- Y hay reelección de presidente también.
Lebensohn.
- A eso voy, señor convencional.
Se ha
promovido la reforma constitucional, y el Congreso Federal ha encarado, por el
procedimiento de enmiendas, la reforma constitucional prohibiendo que ningún
presidente pueda permanecer más de ocho años en el poder. Esta decisión fue
adoptada en 1947 por más de dos tercios de votos constitucionales de la Cámara
de Representantes y del Senado de la Unión, y notificada a la secretaría de
Estado el; 21 de marzo de 1947.Establece esta resolución que tiene que ser
ratificada en el término de siete años para convertirse en reforma
constitucional. Y asómbrese el señor presidente y el informante de la mayoría:
rápidamente veintidós Estados ratificaron la enmienda, a pesar de que faltan
más de cinco años, y estos Estados no son los representativos de una corriente
política. Tengo los últimos cuatro, que lo han hecho en el curso de los últimos
meses del año pasado. Son: Virginia, controlado por el Partido Democrático;
Missisipi, controlado por el Partido Democrático; Nueva York, cuya Legislatura
tiene una representación mixta democrática-republicana, y South Dakota,
republicano.
Es
decir que en la democracia norteamericana, en la que el ejemplo de Washington
fue regla moral imperativa que contuvo las reelecciones pasado el término de
los ocho años; -regla moral que únicamente no rigió cuando circunstancias
históricas exigen una reelección- cuando se vio que había un peligro para el
futuro, se puso en movimiento la máquina constitucional para impedir que en
función de esa posibilidad pudiera construirse un gobierno fuerte que fuera
opresor de las libertades norteamericanas.
LA CONFESION DE LA MAYORIA
Sampay.
- Estados Unidos pudo elegir por tercera vez a su presidente Roosevelt en un
caso en que era necesario para la salvación del país.
Lebensohn. - Eso
abona mi tesis, señor convencional, porque si habiendo existido un solo caso,
un caso tan evidente de necesidad, la enmienda del pueblo norteamericano
resolvió suprimir las reelecciones, eso demuestra cuál es el sentido y la
fuerza de los principios constitucionales.
Sampay.
- Como allí, también aquí podría ocurrir que después de la reelección de Perón
tuviéramos que poner otra vez la prohibición de reelegir.
Lebensohn.
- Es decir, que se trata de una reforma constitucional que no es permanente,
sino que se adecua a las necesidades del presidente de la República, que nos
está presidiendo desde ese sillón.
Borlenghi.
- Porque es un caso excepcional, como el de Roosevelt.
Lebensohn.
–A confesión de parte, relevo la prueba. La mayoría, por la voz de su miembro
informante, ha declarado que la reforma de este artículo se hace para Perón,
que era lo que nosotros sosteníamos ante el pueblo argentino.
Waite Figueroa.
- Perón es el San Martín de esta época.
Lebensohn.
- El elogio del señor convencional es pequeño. A Leguía lo llamaban el Júpiter
americano...
Presidente (Mercante).
- Ruego a los señores convencionales que no interrumpan al orador.
AYER Y HOY
Lebensohn.-
Lo más extraordinario es que el propio actual presidente de la República y el
presidente de la Comisión Revisora de la Constitución han tenido un concepto
tan cerrado de lo que debe ser el mecanismo que impida las reelecciones en la
vida argentina por sus efectos de la moral cívica, que cuando subscribieron en
calidad de ministros del gobierno de facto el decreto de los partidos
políticos, establecieron en función de dignidad política, que no podían ser
reelectos, por ningún concepto, ni por ninguna mayoría, los presidentes, los
vicepresidentes y los secretarios de hasta los subcomités de barrio. Y ahora
quieren la reelección del presidente de la Nación.
LA ACTITUD RADICAL
El
Radicalismo adjudica a esta reforma constitucional la única que acaba de
confesarse públicamente. Su actitud no puede ser modificada por la existencia
de algunas disposiciones que contemplan anhelos sostenidos por nuestro partido.
Han
sido expuestos, en general, en forma de simples enunciados teóricos,
desprovistos del sistema de garantías indispensable para su eficacia por el
moderno constitucionalismo, y repiten el arsenal de frases creado para
desorientar a la opinión pública y levantar una cortina de humo sobre el
objetivo de la reforma. La negativa del sector radical, impuesta por las
circunstancias en que vive el país, no implicará definición sobre ningún
principio particular en sí, sino considerándolos en su carácter de partes
Inseparables de un plan destinado a sofocar las libertades argentinas.
Reelección
presidencial, constitucionalización de la legislación represiva del Régimen,
culminación del proceso de centralización. He ahí la reforma. Todos sus demás
aspectos estaban en la legislación o podía alcanzarse mediante la legislación:
derechos del trabajador, incompletos y falseados; los derechos de la familia,
imprecisos e innocuos; disposiciones atinentes a servicios públicos que en
parte se acercan a nuestro programa. Todo cabía como desarrollo dentro del gran
encuadre orgánico de la Constitución del 53. Lo único que no podía lograrse era
la remoción del infranqueable obstáculo a la ambición de mando de los
gobernantes. De ahí y sólo de ahí nació la reforma.
UN PLAN PROGRESIVO
Quién
siguió atentamente los acontecimientos ocurridos en los últimos años pudo creer
que muchos, lesivos a nuestro pensamiento democrático, constituían simples
expresiones del azar, reacciones temperamentales ante episodios de carácter
personal, devaneos teóricos de asesores extraños a nuestro ambiente. Más si
dirigimos la mirada hacia atrás advertimos que todos estos hechos aparentemente
aislados se integran como piezas de una estructura coherente y orgánica y se
advierte que un hábil estratego ha venido cumpliendo progresivamente un plan
que arriba a su meta. Destrucción del sindicalismo independiente,
avasallamiento de las universidades, humillación del régimen parlamentario,
monopolio de la radio y del cine, restricción de la libertad de prensa, manejo
discrecional de los fondos públicos y de los inmensos recursos sustraídos a la
producción, absorción burocrática del control económico y la reelección
indefinida del jerarca.
EL APARATO REPRESIVO
Ya
están dadas las condiciones totalitarias. Y también dado el aparato represivo
del Régimen para ahogar la insurgencia del pueblo cuando se aperciba de la
realidad de su destino. ¿Qué otra cosa significa la revalidación del decreto
ley de seguridad del Estado, merced a la jurisprudencia de la Suprema Corte?,
de ese decreto ley de corte y mentalidad fascista, que establece que las
huelgas declaradas ilegales -y las declara el organismo administrativo
dependiente del presidente de la República-, constituyen delitos y que quienes
los estimulan reciben pena no excarcelable.
¿Qué
otra cosa significa el registro general de personas, que dará al gobierno la
noción precisa de todas las actividades y movimientos de los habitantes del
país, habitándolo para la vigilancia característica de los Estados policiales?
¿Qué otra cosa significa la sanción de la ley de organización del país para la
época de guerra, que rige en época de paz, que permite al arbitrio del
presidente de la Nación declarar estados de conmoción interna o de emergencia
grave y reemplazar a las autoridades políticas y administrativas normales por
autoridades militaras, y substraer a los ciudadanos de la jurisdicción de los
jueces de la ley civil para someterse al juicio sumario de la ley militar?
¿Qué
significa esto? Es el terror, es el ejército que avanza sobre un país
conquistado. En su despliegue, las tropas llegan a una localidad, se apoderan
de personas y cosas y de su destino. Es la ley de la guerra, la ley
indispensable para que detrás de los ejércitos no existan retaguardias
enemigas. ¿Quién ha pensado eso para que rija dentro de su propio país, con
relación a sus propios nacionales, como instrumento de dominación que solo es
concebible en esos Estados extraordinarios en que la ley suprema es la victoria
en el terreno de las armas?
¿Qué
otra cosa importa la reforma del Código Penal, que cancela prácticamente el
último medio de emisión del pensamiento, la tribuna callejera, puesto que su
concepto del desacato instituye el delito de opinión en sus términos más altos?
-Suena la campana indicadora de que ha vencido el término de que
dispone el orador para hacer uso de la palabra-
Presidente (Mercante).
– Ha vencido el plazo para hacer uso de la palabra, señor convencional por
Buenos Aires.
Albarracín Godoy.
- Hago indicación de que se prorrogue el término.
Presidente (Mercante).
- Se va a votar si se acuerda al orador prórroga del término para usar de la
palabra.
- Resulta afirmativa de 109 votos; votan 138 señores
convencionales-
Presidente (Mercante).
- Continúa en el uso de la palabra el señor convencional por Buenos Aires.
Lebensohn.
- ¿Para qué y en previsión de qué ha sido sancionado este aparato represivo que
coloca un dogal sobre el cuello del hombre del pueblo y somete el honor, la
libertad, el pensamiento y el nivel de vida de los argentinos al arbitrio del
presidente de la República? No somos nosotros quienes hemos despertado pasiones
con la ley del odio, de la división y de la persecución. La nuestra es la
prédica de la tolerancia en el respeto de la opinión ajena, de la paz en la
dignidad del derecho y de la igualdad en el ejercicio común de la libertad.
Triste destino de nuestro país seguir el camino que los otros recorrieron sin
que su experiencia ni final sirvieran de lección. Con los mismos métodos, con
las mismas técnicas, aquellos conductores dominaron a sus pueblos y les
enseñaron a idolatrar, a odiar y hasta a morir conforme a la voz de mando que
descendía entre el coro alucinante de las grandes multitudes organizadas.
LA REVOLUCION-CONTRA
Rotas
aparentemente las coyunturas del fraude, el país debía ingresar en el orden
dinámico de la libertad y debatir en la agitación fecunda de la democracia las
formas de superación política y de transformación económica y social reclamadas
por el espíritu popular, sostenidas por el Radicalismo y postergadas por la
coacción electoral. Fue necesario copar la revolución que maduraba en las
conciencias, conquistar la adhesión de los sectores populares satisfaciendo sus
reivindicaciones más inmediatas y mantener la disposición del poder del Estado
para impedir cualquier modificación de estructura que afectase al orden
impuesto. No fue un movimiento progresista, fue una fase negativa la
revolución-contra que llamara Mac Leish, pero una fase, en fin, del proceso
revolucionario que se esta desarrollando en la humanidad. Sólo intento frenar
el impulso de transformación social, que es el signo de la época, con reajustes
que mantuvieron inalterables las relaciones de producción capitalista una
amortiguación del régimen del privilegio tendiente a fortalecerlo y a
confundirlo con el Estado.
A la
preeminencia de la oligarquía terrateniente formada al amparo del poder
político, en la época de la afirmación de los valores agropecuarios, sucedió la
de las expresiones financiero-industriales vinculadas al poder revolucionario,
que facilitó así el transito de nuestra estructura capitalista a las nuevas
formas impuestas por el desarrollo económico. Al servicio de esta evolución se
colocó a los recursos del país, entregando los dispositivos del control
económico-financiero de la Nación a representantes conspicuos de la nueva
oligarquía.
Los
hechos probarán a nuestros amigos obreros, en su debido tiempo, que la justicia
social no fue un fin en si mismo, sino un medio de lograr el apoyo popular para
conquistar el poder y luego realizar desde él los otros objetivos de quienes se
embarcaron en la gran aventura de dominar al país.
Fue la
misma estrategia social de Napoleón, figura histórica grata al espíritu del
presidente, que proclamó los ideales de la Revolución en tanto sofocó su
espíritu, alejó a los hombres que le eran leales y recreó el absolutismo para
su mayor gloria imperial. Fue, en otro sentido, la experiencia de Bismarck,
cuyo ideal prusiano de potencia inspira al oficialismo. El Canciller de Hierro
no hizo sancionar las primeras leyes sociales alemanas movido por sentimientos
de justicia, sino guiado por la voluntad de atraer a los trabajadores para
dominarlos y forjar con su apoyo una economía y un ejército adecuados a sus
planes imperiales. Y fue también la reciente experiencia de los pueblos
subyugados por el fascismo que entregaron su libertad y su vida en la ilusión
fugaz de suprimir su inseguridad económica.
EL PODER PERSONAL
La
finalidad de fortificar y perpetuar el poder adquiere plena evidencia en la
reforma. La experiencia de casi un siglo señaló las deficiencias de la Carta
del 53 en las limitaciones del poder personal de los presidentes, origen de
gran parte de nuestros males políticos. Más el proyecto no recoge esa
experiencia. El régimen de intervenciones, del estado de sitio, de provisión de
cargos públicos y de gastos ilegales permanece con sus fallas actuales. Se
aclara la imprecisión de conceptos en cuanto a la prorroga de sesiones del
Congreso, pero en sentido desfavorable a la buena doctrina. No se contemplan
garantías efectivas para el resguardo de la autonomía de las provincias y
prácticamente se las ha colocado en situación de dependencias del poder central
al condicionarse su autonomía a cooperaciones que las privan de seguridad
política.
No se
prevé la convocatoria automática del Congreso para juzgar de la pertinencia del
estado de sitio que puede declarar el Poder Ejecutivo durante el receso, o en
su defecto, la creación de una comisión parlamentaria permanente que lo
substituye en esa función. Se incluye, en cambio, el estado de prevención y
alarma, al que se califica de intermedio con el de sitio. Más puede ser
declarado al arbitrio del Poder Ejecutivo, aun durante el funcionamiento del
Congreso, y excluye la opción del abandono del país a los detenidos.
La ley
de residencia, sancionada por la oligarquía para reprimir el movimiento obrero,
cuya derogación comprometieron los diputados gremialistas, no solamente queda,
sino que se incorpora al texto constitucional. Aparecen bases constitucionales
igualmente para el decreto-ley de delitos contra la seguridad del Estado, y
para la vigencia, en época de paz, de la ley de organización del país para la
época de guerra, al establecerse, en expresión de estudiada ambigüedad, la
aplicación del Código de Justicia Militar a los civiles asimilados.
ABSOLUTISMO ECONOMICO AL SERVICIO PRIVILEGIO
Podrá
tener el Poder Ejecutivo presupuestos por períodos de tres años, sellar moneda
y fijar su valor y negarse a contestar verbalmente las interpelaciones a sus
ministros. En el campo económico se constitucionaliza el actual monopolio de
exportaciones e importaciones, sin prever recaudos que evítenla formación de un
absolutismo económico al servicio del privilegio. Nosotros queremos el
contralor social de la economía, pero con un Estado dirigido democráticamente,
en forma tal que todas las fuerzas de la sociedad intervengan, sin
interferencias deformadoras, en la expresión de la voluntad colectiva y tengan
al Estado como agente y no como dueño de la comunidad.
Este
monopolio en los últimos años, ha significado el manejo sin publicidad, sin
fiscalización de la opinión pública ni del Parlamento, de recursos muy
superiores a los del presupuesto nacional y la regulación discrecional del
rendimiento ni del trabajo del campo argentino. El presidente de la República,
por intermedio de sus funcionarios, ha dispuesto discrecionalmente de miles de
millones de pesos. Ni aún hoy en día el país puede enterarse de la naturaleza
de las operaciones de compra o de venta realizadas, de su conveniencia ni del
destino de esas inversiones.
- Hablan varios señores convencionales a la vez, y suena la
campana-
Lebensohn.
- De lo que es el monopolio tal como lo incorpora el proyecto de reforma
constitucional, sin ningún recaudo y sin tener en cuenta lo que aconseja la
experiencia argentina, pueden dar fe dos hechos actuales.
Primero
la mayor parte de la cosecha de maíz del año pasado se encuentra acumulada en
los sitios de producción, semiinvadida y destruida por los parásitos.
-Hablan varios señores convencionales ala vez, y suena la
campana-
Visca.
- Sinceramente, es lamentable que el señor convencional...
Lebensohn.
- Me faltan pocos minutos y ruego a los señores convencionales me permitan
examinar la realidad del régimen que se quiere constitucionalizar.
- Hablan varios señores convencionales a la vez, y suena la
campana-
Presidente
(Mercante). -
Continúa en el uso de la palabra el señor convencional por Buenos Aires.
Lebensohn.
- En segundo lugar, la carencia de divisas fuertes está creando una crisis en
nuestro intercambio internacional. Faltan elementos imprescindibles para la
reposición del utilaje industrial y los que se hallan se cotizan a precios de
exacción.
- Hablan varios señores convencionales a la vez, y suena la
campana-
Presidente
(Mercante). -
Ruego a los señores convencionales no interrumpan al orador que está en el uso
de la palabra.
Lebensohn.
- El presidente y sus asesores dispusieron de centenares de millones de pesos
para la adquisición de barcos. Nos parece muy bien pero en su mayor parte
fueron acordados a grupos navieros particulares y no destinados a la
adquisición de barcos para la Flota del Estado. Con el dinero del país, con sus
divisas, por las cuales la Nación sacrifica su economía...
- Hablan varios señores convencionales a la vez, y suena la
campana-
Lebensohn.
- ...el señor Dodero adquirió una gran flota. Transportan sus barcos la
producción nacional, los inmigrantes y gran parte de las importaciones, en
situación de privilegio, pues se los prefiere para evitarlas demoras que
existieron hasta hace poco tiempo en el puerto de Buenos Aires. Con los dineros
del Estado se adquirieron los barcos; con los contratos del Estado se les paga;
pero los barcos no son propiedad del Estado, sino propiedad privada del Señor
Dodero, el gran amigo del presidente de la Nación.
- Hablan varios señores convencionales a la vez, y suena la
campana-
OSCUROS PRESAGIOS
Lebensohn. - La
reforma se consuma bajo oscuros presagios. Los discursos del presidente
ofrecen, alternativamente, la paz de la sumisión o amenazan encender en guerra
al país. El presidente necesita crear un clima conmocional. Es la
característica de estos regímenes, para los cuales es fatal la tranquilidad que
permita reflexionar. Tiene sus razones. Recibió el gobierno en condiciones
económicas afortunadas que jamás se dieron. Desde el comienzo de la guerra,
Argentina entregó su producción y sus importaciones se restringieron al mínimo.
Los países proveedores estaban absorbidos por el esfuerzo militar. Nuestra
industria naciente debió multiplicarse para atender a las necesidades
nacionales. Floreció el espíritu de empresas y la capacidad técnica. El trabajo
argentino, el trabajo de nuestros despojados productores agropecuarios, acumuló
los grandes saldos en oro y divisas que se atribuyó la jactancia del régimen.
La coyuntura económica hizo pasar a la Argentina de país deudora acreedor y, en
consecuencia, de economía independiente. Ese inmenso caudal ofrecía las
perspectivas más halagadoras para el porvenir nacional. Pero en pocos meses ha
sido dilapidado y nuestro país se encuentra en extraordinarias dificultades
para satisfacer sus exigencias de importación. Se sienten los pródromos de la
crisis. El derroche oficial pudo ser posible extrayendo a la producción las
grandes diferencias entre el precio interno y el externo de que el gobierno se
apropiaba. En baja los precios mundiales, el peso de nuestra máquina
burocrática extenúa a la economía. La ineptitud y el despilfarro trasladan su
incidencia al aumento del costo de la vida. La inflación avanza
vertiginosamente. El Régimen comprende que tendrá que mostrar su verdadera
índole. Cuando los vientos de la prosperidad cubrían nuestra tierra, pudo
aumentar salarios que no afectaban las ganancias impresionantes de los grandes
consorcios, pero para cuando la utilidad merme, está decidido a arrojar el peso
de la crisis sobre los hombros obreros. A la desvalorización monetaria que
restringe el salario real, seguirá una política de congelación de sueldos que
los volverá, en su capacidad adquisitiva, al nivel de 1943, en los tiempos de
la oligarquía conservadora.
En
nombre de la lucha contra la agresión extranjera requerirá sacrificios al país,
y descalificará como traidores a cuantos se opongan a sus agresiones contra las
libertades argentinas.
Hará
rápidamente elecciones en las provincias intervenidas, e inmediatamente e
iniciará la nueva política, el viraje hacia la derecha, apretando el torniquete
extorsivo.
LA PRORROGA DE MANDATOS
Presume
la reacción popular, y para evitarla está urdiendo un inaudito atento contra la
democracia: la suspensión de las elecciones que debían verificarse en 1950,
para la renovación parcial de la Cámara de Diputados y la elección de la mayor
parte de los gobiernos provinciales. Se prorrogan los mandatos de los diputados
y se convertirá a las legislaturas provinciales en constituyentes sui generis
‘para prorrogar a su vez el mandato de gobernadores, legisladores municipales.
El Régimen aspira a un interregno de tres años para aplastar al espíritu de
independencia popular y someter a los argentinos al orden silencioso de los
oprimidos sin esperanza.
Perspectivas
dramáticas son éstas. Errado está el Presidente si presume la mansedumbre de
este grande y generoso pueblo. Escuche las inspiraciones del patriotismo por
encima de los círculos de intereses que rodean al poder. Aún es tiempo para
detener esta marcha que conducirá al país al despeñadero. ¡Que Dios inspire a
su espíritu y salve a la Nación!
SEGUIREMOS LA LUCHA
Nosotros
seguiremos nuestra lucha, dispuestos siempre a tender la mano de la cordialidad
argentina en el decoro hoy ausente de la libertad. No nos sentimos adversarios
del hombre del pueblo que votó en contra nuestra. Sus aspiraciones nacionales
son nuestras aspiraciones nacionales. Cree, a través de los dispositivos
oficiales de información, que son los únicos que hasta él llegan, que se quiere
operar una grande y justiciera modificación del panorama argentino y le presta
el aporte sincero de su devoción. El Régimen sólo podrá subsistir mientras
pueda mantener a ese hombre en el desconocimiento de la realidad nacional; mas,
a medida que transcurran los acontecimientos, el tiempo, que es el gran maestro
de la vida, irá probando quiénes estuvieron lealmente al servicio de esta causa
revolucionaria, por la que hemos luchado con sangre de nuestros corazones.
En
balde será la armazón de fuerza que se pretende erigir. Como todo lo edificado
sobre cimientos de arena, caerá ante el primer soplo de la adversidad.
- Hablan varios señores convencionales a la vez, y suena la
campana-
Lebensohn.
- No es ésta la nueva Argentina; ésta es la última etapa de la vieja Argentina,
de aquella que fue frustrando a través de mil formas cambiantes a la Argentina
irrealizada que quisieron forjar los creadores de la nacionalidad. Tiene su
mismo sentido de goce sensual de la vida, su misma moral de éxito y del poder.
-Hablan varios señores convencionales a la vez, y suena la
campana-
Lebensohn.
- Frente a este régimen que intenta reducir a nuestro pueblo a la categoría de
masas semejantes y moldeables al redoble de las consignas de propaganda,
confiriéndole la justicia como dádiva y la solidaridad como soborno, afirmamos
nuestra absoluta convicción en la lealtad del hombre del pueblo con el destino
nacional, y en su aptitud para elevarse a los grandes fines y a las grandes
responsabilidades, en el libre albedrío negado por los mecanismos de
comprensión espiritual que caracterizan ala actual dictadura. Desvalidos de
poder material, sin prensa, sin radio, sin aulas y sin armas, sin bancos ni
gobiernos, libramos esta batalla...
- Hablan varios señores convencionales a la vez, y suena la
campana-
Lebensohn.
- ...con victoriosa confianza en la prevalencia final de los ideales que
nutrieron la historia argentina, serenos y seguros, porque son nuestros la
razón y el futuro.
-Suena la campanilla indicadora de que ha vencido el plazo de
que disponía el orador-
Presidente (Mercante).
- Señor convencional; ha vencido el plazo de que disponía para su exposición.
Lebensohn.
- El propio miembro informante de la mayoría ha confesado ante la conciencia
argentina que la Constitución se modifica en el artículo 77 para Perón, con el
espíritu de posibilitar la reelección de Perón.
- Hablan varios señores convencionales a la vez, y suena la
campana-
Lebensohn. - La
representación radical desiste de seguir permaneciendo en este debate, que
constituye una farsa.
- Hablan varios señores convencionales a la vez, y suena la
campana-
Varios señores convencionales abandonan sus bancas.
Lebensohn..
- Volveremos,
volveremos a dictar la constitución de los argentinos.
___________
Fuente: Extraído
del libro “Pensamiento y Acción” publicado por la
Fundación Máximo Mena
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